miércoles, mayo 24

Sobre la mesa y el mantel





Poner las cosas
sobre la mesa
y el mantel

De entrada a postre
los platos fuertes
las ensaladas
la mesa entera, toda ella
bien dispuesta, decorada
hasta con flores
o servilletas de colores
Y el mejor vino
el compartido

A media luz


Poner palabras
sobre la mesa
y el mantel
para decirte
decirme
y decirnos
Que nada somos
nada sabemos
si no ponemos
bien las cosas
sobre la mesa
y el mantel

A plena luz

domingo, mayo 21

Ovillos


Mientras devano la memoria
forma un ovillo la nostalgia
si la nostalgia desovillo
se irá ovillando la esperanza
siempre es el mismo hilo

Mario Benedetti

sábado, mayo 20


SI NO PUEDES IR CONTRA EL SISTEMA
PUEDES ATROFIARLO POSITIVAMENTE

Destrozados (o en trocitos)




La culpa la tenía el espejo y Nelly no lo sabía.
El espejo de su pieza se tragaba todos los discursos que noche tras noche ensayaba sin tregua, preparando, anticipando y trazando en el aire los sonidos que Martín escucharía cuando se volvieran a encontrar.
Casi le parecía una canción memorizada pero, llegado el momento, se quedaba sin palabras. No porque no tuviera qué decir, ni porque Martín hablara mucho como coartándole el diálogo, sino porque en esos momentos, lejos de su casa y de su espejo, las palabras se esfumaban.
Cualquiera diría que los nervios la traicionaban o que Martín era un galán excepcional y especialista en dejarla en blanco. Ella sabía que no. Tenía un par de cosas bien importantes que decirle a ese “galán” engreído y poco serio en los momentos precisos.
Otra noche frente al espejo. Una vez más se encontraba preparando todas las respuestas posibles y las imposibles también, los gestos, el movimiento de sus ojos y sus labios. Tan fácil , tan claro se veía todo refugiada en su reflejo.
Lo que ella no sabía era que su inerte espejo todo lo tragaba por un misterioso conjuro quizás que Nelly ignoraba. Solo saldría de su enredo cuando pudiera improvisar algunas osadas líneas en esa relación enfermiza que ya dejaba bastante que desear, o simplemente cuando dejara de hablarle al espejo.
Tiempos le costó entenderlo. Un día, fue tanta su rabia al volver a casa que no soportó ver su cara enlagrimada y lo quebró de un solo golpe.
Al otro día rompió con Martín.
Y así fue como Nelly, Martín y el espejo, siguieron viviendo en trocitos.

Revuelta


Hay tantos pretéritos
dos futuros
y un solo presente
El verbo y las ganas de sentir
Revuelta...
Sí, siempre doy
las mismas vueltas



"Cada vez el presente me conquistaba más. El pasado era una colección de presentes sellados, el futuro una serie de presentes a emitir."

Benedetti - La borra del café -

piedra, papel o tijera


juego de niños
piedra, papel o tijera
piedra tú
papel yo
tijera ella

piedra-papel, y te envuelvo
y te dejas
papel-tijera, y viene ella
y me destroza

me destroza
afilada por la piedra

extraño romance, tijera-piedra

piedra:
- ¿papel o tijera?




(imagen: el actante pancho)

Curvas


Sólo unas curvas

Como una marea, hoy, afectada por la Luna
escribo curvas
un par de curvas
Y si me hicieran escoger entre:
Saturno
Urano
Neptuno o
Plutón
me iría a Saturno,porque tiene más lunas
tantas…
Quizá viviría escribiendo de la pura
inspiración
Por mientras me basta una, la mía
que me hace sentir
como marea, hoy, afectada
escribiendo curvas
un par de curvas.

viernes, mayo 19



Ni yo tenía la exclusividad en tus sueños, ni tú en los míos.
Apareces de pronto, de cuando en vez - como leí por ahí una vez –
Apareces como muchos otros, en lugares comunes, en recuerdos de lugares donde tal vez nunca estuviste.
Entonces, dejo de soñarte y te recuerdo, dejo de recordarte y te invento.
Te invento como a mí me gusta, pero a ratos haces lo que quieres, adquieres vida propia inventada y te vas
.





(imagen: Danelí)
Tantos aromas, boletos gratis a lugares conocidos, a situaciones, cuerpos, colores atrás, boletos gratis que inconscientemente conseguimos y guardamos. Son de vuelta, sólo de retorno.
El aroma del humo de la leña húmeda, la olla con ciruelas derretidas con dulce olor rojomorado, olor a humedad y a sequedad de la ropa tendida en casa cerca de la estufa.
Aromas de anticipación al invierno valdiviano, aromas de retrospección al invierno pasado, trocitos, gotitas de lluvia temprana que mojan por dentro uno que otro fruto seco del recuerdo.

Y es que los aromas hoy se me repiten, voy de un lado a otro viajando, con olor a nostalgia en el cuerpo.
Quizas un pasajero cercano llevaba tu perfume, quizás me encontré contigo y no nos vimos. Y yo… te sentí latir en cada giro de este viaje.